Salvador e Irene son amigos. Y si no llega a existir el WhatsApp hubieran podido seguir siéndolo toda la vida. Hasta que una noche, él escribe: “Me encantaría hacerte el amor”.
A partir de ese momento y aunque ambos saben que lo suyo es imposible, se hechizarán mensaje a mensaje. Y espiando su conversación, tú también te vas a enamorar de ellos.
Una moderna historia de mensajes cortos y sentimientos largos que te mantendrá en línea del principio al final. Porque las hormonas te las puede alborotar cualquiera, pero en cambio las neuronas son muy pocos los que las saben acariciar.
Imaginad que os llega al móvil un mensaje que dice "Me encantaría hacerte el amor", así de repente, de una persona que conoces desde hace años. De entrada, puede parecer algo brusco. Pero, ¿si en esa frase se reflejara algo más? Un sentimiento, el arrepentimiento por no haberlo dicho antes, una última oportunidad...
Pues así es como comienza "Fantasías absurdas"; todo parte de ese primer mensaje que hará que Irene y Salvador giren dentro de una fantasía que ellos mismos deberán valorar si es, o no, posible. Ambos son amigos desde hace muchísimos años, de hecho, fueron los mejores amigos. Por eso, la frase trasladará a Irene al pasado, unos veinte años atrás, a su última fiesta juntos, a la única oportunidad que tuvieron de ser algo más que amigos. Algo, que ambos anhelaban, pero que no tuvieron el valor de provocar.
Sin embargo, Irene ya no es la joven de veinte años de aquella noche. Tiene una familia, un ex marido y un novio con el que prevé casarse. Cree que el momento de Salvador y ella ya pasó; su relación sería imposible, y no están tan unidos como antes. Tampoco Salvador es el mismo, su trabajo como escritor le absorbe y ha sido incapaz de madurar en sus relaciones sentimentales.
El miedo en ambos es palpable pero, mensaje a mensaje, entrarán en un situación complicada que hará evidente lo que tanto tiempo supieron y evitaron por no acabar con su amistad. Seremos espectadores de un juego en el que ambos avanzarán y retrocederán por el temor a lo que podría venir, a que las cosas no salgan bien, a que no se cumplan las expectativas que han ido acumulando durante años al idealizar su deseo.
Sus personajes resultan cercanos y naturales. Irene será nuestra principal narradora y a quien más comprenderemos. Y aunque con Salvador tuve mis más y mis menos, sí que me gustó su actitud final y le comprendí en cierta manera.
Nos identificaremos con sus mensajes, pues refleja a la perfección cómo actuamos ante la necesidad de la persona que deseamos. La sensación de que todo gira en torno a ella, el ansia de su cercanía y contacto continuo. De un nuevo cruce de miradas o una conversación que esconda lo que verdaderamente transmite una mirada. Deseo y anhelo en estado puro.
"Fantasías absurdas" es una historia corta, que refleja la perturbación de dos personas que se dan cuenta de que lo que tienen, quizás no es lo que más deseen. Las emociones que le siguen a esa evidencia y el miedo a cómo actuar sin destruir lo que ya se ha construido. Además nos deja entrever que puede existir un "quizás", una segunda oportunidad ante una amor pasado y una historia que no pudo ser.
Su final me sorprendió, necesitaba algo más...saber cómo continuaba todo. Pero sé que Idoia está preparando una continuación sobre la historia de Irene y Salvador. Y por supuesto, la leeré.
Gracias a su autora por el ejemplar.
Gracias a su autora por el ejemplar.